Los astros y el Tarot

Lo místico, lo espiritual, la futurología… Es algo que a todos nos interesa, en mayor o menor medida. ¿A dónde vamos? ¿A dónde nos dirigimos? Preguntas que están muy arraigadas a dos palabras, los astros y el Tarot. Desde tiempos lejanos, los astros y su ubicación en el cosmos siempre han estado muy arraigados con las técnicas adivinatorias. El Tarot es una ciencia que ha servido para predecir episodios relacionados con la salud, el amor, la fortuna o el trabajo.

Pero no es lo único que ambos tienen en común. Las dos se basan en los símbolos. Por ejemplo, ambas técnicas basan sus predicciones en torno al Sol a la hora de sacar conclusiones acerca del futuro. Para los dos, el sol viene a representar la fuerza, la masculinidad, también el orgullo y la lealtad.
Otro de los astros más importantes también está presenta en la lectura de las cartas del tarot. Se trata de la Luna. Representa la maternidad, la fecundidad y está estrechamente vinculada con la familia y el hogar.

Durante la lectura del tarot, también se dan asociaciones con los astros. Por ejemplo, la figura del Ermitaño, que está unido a Saturno. El Ermitaño es el anciano del Tarot y está unido a Saturno dado que representan las restricciones, la disciplina y el trabajo duro. En términos generales, vienen a simbolizar al gran maestro.

Se trata de dos técnicas que usadas y complementadas, pueden ofrecer una información más rica que si son usadas de manera separada. Sus combinaciones y, el hecho de que compartan significados y símbolos, pueden darnos una lectura más precisa sobre lo que nos depara el futuro.

Lo místico, los desconocido, aquello que se nos escapa siempre ha estado asociado tanto a los astros como al Tarot. Seguramente esa relación no sea producto de una casualidad.